El mundo está poblado miles y miles de amantes del queso, sin embargo, es habitual encontrar a una gran cantidad de personas que a pesar de encantarle, prefieren no comerlo porque corre el viejo rumor de que el queso no es saludable para nuestro organismo. Por eso, hoy en María Madre de Queso te contamos algunas de las razones por las que debes seguir comiendo queso sin ningún tipo de remordimiento.
Una de las principales razones por las que no debes de dejar de comer queso es por la elevada cantidad de vitaminas que posee. El queso contiene vitaminas A, D, E, K y algunas vitaminas del grupo B. Por este motivo, el queso es bueno para la vista, también provoca que tu cuerpo asimile de mejor forma el fósforo y el calcio.
De la misma manera, el queso posee triptófano, un aminoácido que es el encargado de estimular la serotonina, lo cual evita que se produzcan episodios de ansiedad y depresión.
Asimismo, existe una falsa creencia que dice que el queso aumenta el colesterol. Sin embargo, un estudio de la Universidad de Copenhague ha demostrado que si comes queso no se aumentan las cantidades de colesterol LDL (malo).
Por otro lado, existe un estudio de la Universidad de Texas A&M (E.E.U.U.) que defiende que el queso curado es bueno para reducir el riesgo de padecer cáncer de hígado.
El queso es un alimento muy rico en calcio, lo que es muy bueno para los huesos y dientes, ya que ayuda a prevenir la osteoporosis. Como dato curioso, debes saber que los quesos que poseen una pasta dura tienen hasta tres veces más calcio que los de pasta blanda.
Si quieres comer un alimento con una gran cantidad de niveles de energía, el queso es tu opción ideal, ya que además de ser una fuente de energía, es un alimento natural y sano.
Del mismo modo, el queso es muy recomendable para la salud bucal, ya que estimula la producción de saliva lo que fomenta la eliminación de bacterias.
Así que ya sabes, ¡no dejes de llenar tu vida de queso y podrás tener una vida más saludable y cargada de felicidad!
